Lost in the Silence

Invitado

Como cada día, salía del hotel en el que me hospedaba con una pequeña mochila, un mapa y mis ganas de seguir descubriendo la ciudad.

Tenía ganas de buscar un sitio tranquilo, un sitio en el que no esperaba encontrarme a nadie. Un sitio en el que pudiera perderme en el silencio y vagar por mis pensamientos.

Llevaba como una hora caminando y hacía tiempo que había salido de las calles de altos edificios y cuidadas calles. Ahora caminaba por un lugar en el que se veía una casa cada cien metros, con jardines descuidados y algún que otro cartel de "Se Vende". Si no fuera por que parece desierto, sin duda me habría venido a vivir a este lugar.

Caminaba mirando el mapa, buscaba el cementerio. Podría parecer algo tétrico que una chica recién llegada, que no conoce nadie en la ciudad y que no tiene familiares enterrados fuera en busca del lugar de reposo de los muertos... pero así soy yo. Yo también necesitaba ese lugar de reposo para perderme en mis pensamientos sin que ningún desconocido me molestara.

Después de media hora, por fin pude llegar hacia el cementerio. Estaba bastante bien cuidado: los panteones, las tumbas con grandes estatuas de ángeles o cualquier otra cosa. A veces sólo eran pilares de un metro de alto con el nombre del difunto que se hallaba ahí enterrado. Un lugar realmente tranquilo...

Me dirigí hacia el fondo del cementerio. Había como un pequeño bosque que coronaba un pequeño monte. Ahí me quedaría... Ese sería mi lugar para perderme en mi silencio...

Cuando por fin llegué al centro, vi un pequeño prado y decidí sentarme bajo uno de los árboles, viendo ese lugar tranquilo... O eso creía, pues noté que alguien me observaba desde algún lugar...

- ¿Quien hay ahí?... -típica pregunta de las películas de miedo, pero fue lo primero que pude preguntar mientras miraba a mi alrededor con cierta desconfianza.

Invitado

Ultimamente el hospital se habia vuelto ruidoso. Cada vez habian mas enfermos, mas demonios y menos muertos. Con el paso de los años me di cuenta que las personas eran vacias, aunque no todas. Pero eran contadas las que realmente se interesaban por otros sin obtener algo a cambio.

Esa noche estaba fastidiado de todos, hasta de mi. Como podia ser eso posible? Realmente no lo entendia. Pero sabia que caminar por unos minutos en tierra santa seria bueno. Aunque no me fuera permitida la entrada.

Al llegar deje el ramon de flores violetas que llevaba sobre una tumba. La cual tenia una gran cruz puesta. Hace cuanto tiempo habia pasado ya desde que lo conoci. Una sonrisa se formo en mis labios y acto seguido predi un cigarrillo llevandolo a mis labios dandole una gran calada cuando escuche ruidos.

Camine hacia ese ruido notando ahi una mujer, que se percato de que la veia- un huesped que visita este lugar de vez en cuando, ahora pregunto quien eres tu?

Invitado

Escuché su voz mientras le veía salir del lugar donde estaba: "Un huesped que visita este lugar de vez en cuando, ahora pregunto quien eres tu?"

Un escalofrío recorrió mi espalda al escuchar esa voz, tan profunda que me helaba la sangre... Algo no era normal en todo esto...

- Solo soy alguien que busca la paz y el descanso que solo este lugar puede ofrecer a un vivo... -murmuré mirando sus ojos que parecían resplandecer.

Me sudaban las manos, obviamente tenía algo de miedo. No es muy común encontrarse a personas en un cementerio, pues normalmente dejan las flores o las ofrendas y se van...

Saqué de mi pequeña mochila una botella pequeña de agua y di un leve sorbo mirando aún sus ojos... Definitivamente había en él que me hacía sentir que algo no era normal...

Invitado

Camine con calma saliendo de entre los arboles mirandola fijamente- Es gracioso...que un vivo venga al lugar de los muertos en busca de paz. -sonrei de lado dando una nueva calda a mi cigarro.

Pude percibir el miedo y todo lo que hacia para mantenerse calmada. Mire hacia los lados y luego fije mi mirada en ella- no es tarde para que estes afuera? -pregunte hasta quedarme unos pasos lejos de ella observando su cuerpo y lindo rostro. Le di una calada a mi cigarro expulsando el humo hacia un lado para que no se fuera contra el rostro de la mujer.

De pronto todo estuvo en silencio. No se escuchaba ningun tipo de ruido como solia pasar. Los grillos, los pajaros y el viento todo se habia detenido. Esta chica no era normal. Era de esos que nacian con el don, un medium quizas-

Invitado

Le parecía... ¿gracioso? Pues yo no le veía la gracia por ningún sitio... Caminaba hacia mi y eso solo me hacía sentir mas nerviosa... Pero no nerviosa como otra persona... Esto era muy raro...

- Es tarde para quien sigue el tiempo... -murmuré un poco viendo como se paraba observándome. Su mirada recorría mi cuerpo y mi rostro para luego dar una calada a su cigarro y expulsar el humo hacia un lado.

Pero justo después de eso todo quedó en silencio. Ni el viento, ni las hojas de los árboles, ni los grillos, ni los pájaros... Es como si la naturaleza, siempre viva se hubiese apagado de pronto. Entonces me alarmé... Este hombre no era normal...

Rápidamente me levanté tomando mis cosas dispuesta a irme nada mas intentara acercarse...

- ¿Quien eres realmente...? -murmuré mientras le miraba con los ojos entrecerrados.

Invitado

La escuche- los mortales siempre se fijan en el tiempo, que raro que tu no, Mi Hee -sonrei de lado viendo como tomaba sus cosas rapidamente pero con disimulo. Relami mis labios con lentitud esperando a que se moviera para atraparla. Termine mi cigarro con suma calma- Quien soy es un misterio....pero lo que soy....es otra cosa... -desapareci y apareci atras de ella sujetando su mochila y quitandosela-

Hize que su mochila desapareciera- Ni siquiera se quien soy...pero se que estoy aqui vagando por el mundo terrenal en busca de...-sonrei de lado haciendo que mis colmillos resaltaran, luego de relamerlos. Decidi no terminar mi frase viendo a la chica-

Trone mis dedos y todos los ruidos regresaron, inundando el silencio. La atmosfera ahora era un poco menos agobiante y aterradora- Tu vida no fue nada facil -sonrei haciendo que la mochila apareciera frente a ella pero vacia.

Invitado

Noté el tirón cuando me quitó la mochila, girándome para ver como esta desaparecía. Lo sabía, no era normal, no era humano...

Me estremecí escuchando sus palabras con atención cuando vi como sonreía haciendo que sus colmillos resaltaran mientras el pasaba su lengua por ellos mientras me veía. Si creía que iba a pedir por mi vida... estaba muy equivocado...

Escuché como tronaba sus dedos y de pronto la naturaleza volvió a estar tan viva como siempre, haciéndome sentir mas segura.

"Tu vida no fue nada facil" Y que le importará a él como haya sido mi vida... Tomé mi mochila que había aparecido pero en esta no había nada... Ni mi cartera, ni el agua, ni el mapa...

- Devuélveme lo que había dentro... -le miré con los ojos entrecerrados, sacando un coraje que nunca había sentido en mí... Quizás, salir de la prisión de mi casa y de los abusos de mis padres me había dado el coraje para seguir adelante.

Invitado

La mire observando ese coraje que traia en su interior. Se me ocurrio un plan. Me acerque a ella abrazandola- claro que te lo devolvere...-susurre a su oido sonriendo de lado a lado. Cubri sus ojos con mi mano. Ahora sabia por que esa chica se me hacia tan familiar. Su madre habia muerto en mi hospital.

Ese hospital tenia algo que lo hacia especial algunas veces castigaba a personas que habian sido malas tanto en su juventud como en el transcurso de su vida hacia la muerte. Le mostre a Mi Hee como habia llegado su padre un poco enfermo de gripe y como habia pasado dos dias siendo atormentado por los fantasmas del lugar y como uno que otro demonio abusaba de el.

Luego de que su padre muriera su madre enfermo con una rara enfermedad producida por el mismo lugar. Su madre no soporto y termino suicidandose- Todo se paga en esta vida -sonrei de lado quitando mi mano, caminando unos pasos hacia atras y tronando mis dedos regresando todo lo que habia antes en su mochila.

Invitado

Me abrazó... Se atrevió a abrazarme...

Mi cuerpo se tensó pareciendo una figura del más duro mármol. No me gustaba el contacto físico, no podía con el y menos cuando... Cuando sentí que su mano cubría mis ojos. Pero cuando iba a protestar vi a mis padres.

Vi a esos abusadores y justo cuando iba a quitar su mano de mis ojos vi la historia en tercera persona. Vi a mi padre llegar, malo con lo que se supone que era una gripe... Era el mismo hospital de esa ciudad... ¿Acaso habían venido a buscarme?

Comencé a ponerme nerviosa, no me gustaba la idea de que mis padres estuvieran en la ciudad... Pero... algo pasaba... Lo ingresaron y... eso... ¿eso eran fantasmas? Así... que lo que sentía en ese hospital era real... Vi como abusaban de él también... pero no estoy segura de si eran fantasmas o personas reales... o alguien como el que me está enseñando esto...

Seguía viendo esa historia, donde después de la muerte de mi padre se veía a mi madre. Al parecer enfermó al visitar a mi padre, pero.. ni siquiera aguantó... se quitó la vida.

- Cobarde... -llegué a murmurar cuando vi como mi madre se quitaba la vida sin ser capaz de luchar como ella tuvo que hacer por tantos años...

"Todo se paga en esta vida" le escuché decir mientras quitaba su mano y me soltaba notando el peso de las cosas en la mochila girando para verle a los ojos.

- Eso que me has enseñado... ¿es real? -le pregunté con cierto miedo por si seguían vivos y con cierta alegría por si era cierto.

Invitado

Camine un poco rodeandola podia sentir cualquier tipo de emocion inundando el aire excepto tristeza- Si esto es verdad -le sonrei indicandole que me siguiera caminando por entre las tumbas- Puedo ser todo excepto un mentiroso -dije riendome mientras sacaba un cigarrillo llevandolo a mis labios y con un suave tronar de mis dedos el cigarro se prendio. Dandole tranquilas caladas-

No deberias andar por las calles, no es seguro -dije con honestidad. Con el simple hecho de acercarme a ella vi todo lo que habia pasado. Pero que no se confundan las cosas ya que, yo no siento nada por nadie. Llegamos hasta unas tumbas con los nombres de sus padres- los sepultaron ayer. Alguien pago por esto, creo que fue un familiar -dije con toda tranquilidad- ahora que escapaste, te dieron por muerta y todo lo que poseian sera parte del hospital. Te quedaste sola y sin nada. Creo que deberias empezar por buscar un lugar donde quedarte y un trabajo.

Deje salir el humo mientras hablaba viendola. Sonrei recorgando los gritos de su madre y padre- Si te hace sentir mejor sufrieron lo que tu sufriste...por eso tu madre no lo soporto. Le hizo recordar todo eso que te provoco...y se dio pervencida. -meti una de mis manos al bolsillo de mis pantalones.- Puedes ir a ver a algun doctor del hospital te entregaran sus cosas y la cantidad que le debes al hospital -sonrei de lado-

Invitado

Vi como me rodeaba y le seguí caminando por las tumbas. Vi como sacaba un cigarrillo y lo prendía de un chasquido, dándole algunas caladas.

- Hay tantas cosas que no son seguras y que aún así las hacemos... -murmuré mirando al cielo para luego ver como se paraba frente a unas tumbas donde estaba el nombre de mis padres. Miré con desprecio ambas tumbas sin la más mínima tristeza. - Me dieron por muerta... -reí con cierta ironía... mi familia nunca me quiso, no era un secreto, pero darme por muerta era quizás lo mas atroz que habían hecho en su vida.

- Siempre he estado sola y nunca he tenido nada. Lo poco que tengo es por lo que pude robarle a estas personas para poder escapar -señalé la tumba con indiferencia.

Me contaba que mis padres habían sufrido lo mismo que me habían hecho a mi y que por eso mi madre se suicidó.

- Eso solo la hace mas cobarde por no ser capaz de soportar ni la más minima parte que me hicieron a mi -dije con desprecio- No iré a ver a ningún doctor, y no pagaré esa cantidad -le miré seria- ¿No me han dado por muerta? Que la paguen ellos... -me encogí de hombros.

Invitado

Escuche sus palabras poniendo atencion a cada una de ellas. Luego solo la observe sonriente. Esta chica tenia tantas emociones encontradas. Parecia que no conocia nada de las cosas buenas que se supone da una familia. Le di varias caladas a mi cigarrillo antes de botarlo por ahi.

Note la indiferencia en su tono de voz y desprecio. Solo me degustaba con todo lo negativo que provenia de esta chica. Luego de que le dije que fuera al hospital cuando se nego me acerque de nuevo a ella sujetandola del cuello y subiendola en alto asfixiandola un poco- No es una opcion. Tal ve ellos te dieron por muerta. Pero yo te encontre y debes pagar la deuda de tus padres.

Mis ojos cambiaron a un negro opaco. Acariciando con mis garras la suave piel de su cuello- No me hagas enojar -relami mis colmillos de nuevo con lascivia-

Invitado

Vi como se acercaba y tomaba mi cuello levantándome del suelo, haciéndome reaccionar para tomar su muñeca con mis manos y clavar mis uñas en un intento de liberarme mientras le escuchaba.

Aunque me amenazara de esa manera para mi ese tipo de amenaza ya no tenían efecto, para mi era tan cotidiano como el que bebe agua cuando tiene sed.

Vi como sus ojos cambiaban a un color negro opaco, notando sus garras en la piel de mi cuello mientras me advertía que no lo enojara, viendo como lamía sus propios colmillos.

- Eres tu el que te enojas sin motivos... -murmuré apenas intentando respirar aún colgada de su mano.- Para mí, esto fue parte de mi día a día y una amenaza así... no tiene efecto... -murmuré cerrando los ojos tosiendo un poco.

Invitado

La mire sonriendo- entonces tal vez tenga que jugar de otra manera -rei un poco haciendo que mi otra mano cambiara su forma dandole la apariencia de una espada atravesando el costado de Mi Hee- lindo color - poco a poco su sangre mancho su ropa y la deje caer-

No estoy enojado pero haz lo que te indique. No me gustaria perder el tiempo en ir a buscarte. Consigue y trabajo y paga la deuda de tus padres. Es lo unico que pido. -hize que la espada volviera a regresar a su forma original viendo mi mano llena de su sangre. Ahora habia infectado a la menor, asi que tenia dos opciones ir al hospital y pagar poco a poco lo que debia o ser un paciente-

Invitado

Vi como su mano se convertía en una espada y atravesaba mi costado haciendo que jadeara del dolor, cerrando los ojos con fuerza mientras caía al suelo.

Le escuché mientras apretaba con mis manos la herida para no desangrarme ahí mismo.

- Y cómo se supone... que voy a encontrar trabajo... con esto...? -murmura mirando su herida con rabia. Al parecer ni con sus padres muertos podría estar tranquila y fuera de abusos... En momentos como ese deseaba haber muerto a manos de sus padres hace tiempo.

- Todos... sois iguales... -murmura con desprecio mordiendose el labio.

Invitado

La mire sonriendo como se quejaba- ve al hospital. Ahi te curaran -sonrei. Ella iria al hospital viva, enferma o muerta. La manera en la que fuese realmente no me importaba. Apostaba que si ella se hacia fantasma seria de los peores con el unico deseo de herir a los demas-

Negue cuando menciono que todos eramos iguales- No deberias generalizarlos.....-me agache poniendome en cuclillas frente a ella sujetando su rostro haciendo que leves heridas se hicieran en sus mejillas- habemos otros que somos peores -sonrei con calma viendola. Cuanto mas se tardara en ir mas dolor le causaria la herida.

Invitado

Un escalofrío recorrió mi espalda cuando dijo que fuera al hospital. No quería ir, cualquier cosa menos pisar ese antro lleno de oscuridad...

Cuando tomó mi rostro entrecerré los ojos, pues cada vez me dolía mas. Llevé mi mano hasta su rostro y clavé mis uñas en su mejilla mirándole fijamente a los ojos.

- Procura... que no me muera... porque como lo haga... me vas a tener que aguantar a tu lado por toda la eternidad... -murmuré con cierta rabia mientras notaba como se hundían mis uñas en sus mejillas.- Y todos sois iguales al fin y al cabo... todos hacéis daño... todos sois la misma escoria... -murmura al borde de la inconsciencia por el dolor.

Invitado

Deje que me hiciera lo que quisiera. No podia sentir dolor ni cualquiera de esas emociones humanas. Hize que quitara su mano de mi mejilla sacando de mi bolsillo una daga dandosela- tanta rabia tienes? -sonrei de lado con malicia- Si todos lo somos hasta tu....toda tu eres odio y rencor puro -acerque mi rostro al suyo susurrando contra sus labios-

Lastima que tan lindo cuerpo haya sido manchado...llevas el pecado impregnado en tu cuerpo....y tu esencia....-sonrei con burla. Pase mi mano por su herida curandola. Aunque hize eso el virus estaba en su cuerpo si se alejaba tantos metros del hospital la herida se abriria. Mire fijamente sus ojos, esto era la humanidad-

Invitado

Me dio una daga viéndole sonreír con malicia... Yo sabía que yo también era igual que ellos, puede que incluso peor... Mi odio hacia la humanidad era demasiado grande como para perdonarlo con palabras bonitas.

Mientras el se acercaba a mis labios diciendo que mi cuerpo estaba manchado, contaminado. Que no era puro... Yo había usado la daga contra mi, a pesar de que él me había curado.

Me clavaba la daga en mi propio vientre, lenta y tortuosamente. El dolor inundaba mi zona baja, que comenzaba a sangrar con abundancia, pero poco me importaba. Cuando antes me fuera de este mundo, mejor.

Vi como me miraba a los ojos y solo pude sonreír enseñándole la daga completamente ensangrentada, tirándola hacia un lado, ya bastante cansada y adolorida como para levantarme.

Invitado

La mire fijamente, levantandome- patetica y aburrida -me levante sin siquiera mirarla a ella o a la daga. Saque otro cigarrillo prendiendolo con solo mirarlo. Le di una profunda calada mirando el lugar-

No sabia por que las personas si eran tan brillantes y veian la realidad del mundo. Preferian lastimarse que lastimar a alguien. Eso era tan aburrido y tan insipido. Mire hacia el cielo y comenze a caminar, ya habia sido suficiente si ella queria morir no la detendria. Realmente me daba igual su existencia- Ja ne -me aleje dando caladas a mi cigarro. Pensando en cosas nuevas para el Pub y el Hospital.